En este marco, un equipo integrado por 10 combatientes del SPLIF se encuentra trabajando dentro del perímetro del incendio, específicamente en los sectores que aún presentan actividad. Su principal tarea es enfriar los puntos calientes para evitar cualquier posibilidad de reactivación del fuego.
Según el último informe proporcionado por Parques Nacionales, el incendio muestra una mínima actividad de propagación, lo que indica que las condiciones están mejorando gradualmente. Sin embargo, es crucial mantener la vigilancia y el trabajo constante para contener por completo el fuego y prevenir cualquier resurgimiento.
Hasta el momento, el área afectada por el incendio abarca 634.8 hectáreas, lo que destaca la magnitud del desafío al que se enfrentan los equipos de combate al fuego. Sin embargo, gracias al trabajo conjunto entre los distintos organismos involucrados, se espera que la situación mejore aún más en los próximos días.
La cooperación y el trabajo en equipo siguen siendo fundamentales en esta lucha contra el incendio forestal, y se agradece enormemente el esfuerzo y la dedicación de todos los involucrados en la protección de este invaluable patrimonio natural.