Toda obra vinculada al saneamiento, está pensada como política de Estado a largo plazo, más allá del proyecto que gobierne a nivel nacional. No obstante el Gobierno Nacional continúa suspendiendo proyectos que son cruciales para el desarrollo económico y social de la población.
En Río Negro, las obras de los planes directores de agua potable en Viedma y Catriel han sido paralizadas debido a la falta de financiamiento, al igual que la discontinuación del colector costanero en San Carlos de Bariloche y los planes directores de desagües cloacales en General Roca y Catriel, por parte del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA).
Las obras del plan director en Viedma contemplan los refuerzos de redes de distribución y una nueva planta potabilizadora, permitiendo triplicar la capacidad de producción actual. Además, se prevé la sectorización del servicio, para poder trabajar ante un eventual episodio en sitios puntuales evitando dejar a toda la localidad sin agua. Esto beneficia a la población actual y de diseño proyectada a 30 años.
En cuanto a la obra de agua potable en Catriel, comprende una nueva obra de captación, una estación de bombeo e impulsión de agua cruda alimentada desde el canal matriz de riego y se acondicionarán las instalaciones existentes en los cuatro pozos filtrantes ubicados al sur del barrio Santa Cruz, así como también la impulsión actual de agua cruda a la planta potabilizadora, atendiendo la demanda de la población actual y a 25 años.
Cabe destacar que también los proyectos de los Planes Directores de Líquidos Cloacales en General Roca y Catriel, fueron elaborados por el DPA (Departamento Provincial de Aguas). El plan de Catriel contempla la construcción de una nueva planta depuradora y una reestructuración del sistema cloacal, mientras que la de General Roca incluye la remodelación y ampliación de la planta de tratamiento de líquidos cloacales. Dichas ejecuciones dependen del ENOHSA.
En Bariloche, el Colector Costanero se encontraba colapsado y es por ello que se proyectaron las obras de recambio del colector, incluyendo una estación de bombeo y una línea de impulsión hacia la planta depuradora. Esta obra es de vital importancia para preservar el lago Nahuel Huapi, ya que contribuye a la protección del entorno y mejora la calidad de vida de la ciudadanía y el saneamiento de la localidad.