A pesar del contexto de pandemia, los periféricos de la ciudad se prepararon con los protocolos correspondientes y se actualizaron para dar respuestas a las demandas de salud de la población y continuar con diferentes atenciones y servicios.
Si bien los centros de salud no dejaron de atender, la jefa de obstetricia de los CAPS, Romina Bartusch, remarcó que bajó mucho el flujo de pacientes. “Por un lado muchas mujeres embarazadas tuvieron miedo de ir a un control, por temor a contagiarse y, por otro, desconocían que los periféricos estaban atendiendo”, explicó.
“En ningún momento se cortó con la atención para controles de embarazo, si hubo baja en las atenciones porque la paciente creía que el control no era una urgencia y se quedaban en su casa para cuidarse. Ahora estamos un poco más organizados y las pacientes realizan sus controles”, remarcó Bartusch.
Además, indicó que cortar con la atención no es lo más recomendable ya que es un cuidado de importancia en la salud de la madre y del bebé y así también, recomendó continuar con su control de embarazo en los centros de atención establecidos para tal fin.
Cabe destacar el trabajo y el compromiso de los empleados de salud de los centros de atención primaria de Cipolletti, quienes, a pesar del contexto de pandemia, continuaron en todo momento con su atención hacia los vecinos, adaptándose y organizándose de acuerdo al flujo de paciente y el recurso humano disponible.