La oftalmóloga y miembro del hospital “Artémides Zatti” de Viedma, Susana Marco, mencionó al respecto que “es preferible hacer pequeños descansos, más o menos de cada dos horas, ya que nuestros ojos están en continua exposición con la televisión, la computadora, celulares y cualquier dispositivo moderno con pantalla, y no está preparado para esto”.
“Por ejemplo, si se está durante ese tiempo trabajando con la computadora, no está bien pasar a la lectura de forma inmediata. Lo que debe hacerse es tomar un descanso de alrededor de quince minutos y luego retomar la tarea”, explicó la profesional.
Señaló que no tomar este intervalo de descanso “es como si le dijéramos a una persona que vaya al gimnasio y levantar pesas durante cuatro horas seguidas sin parar; es decir, se puede producir un fuerte cansancio. Lo mismo sucede con el cansancio visual, se produce enrojecimiento de ojos y dolor de cabeza, lo que puede empeorar patologías que ya podemos traer de forma hereditaria”.
“Si no hay descanso, no existe consulta, anteojos o gotas que puedan mejorar eso”, señaló la doctora.
Remarcó que “otra cuestión importante sería medir los reflejos que recibe la vista, por ejemplo, si estamos con una computadora enfrente a una ventana, más que nada, en momentos que dé mucho el sol, es mejor poner una cortina para protegernos”.
“Es fundamental tener una iluminación adecuada para realizar nuestras tareas habituales. Ni muy poca, ni en exceso”, agregó.
Para finalizar, la oftalmóloga remarcó que, si bien hay gotas que ayudan a la adecuada hidratación de la superficie ocular para personas que están seis horas o más usando la computadora o leyendo, deben ser recetadas por un especialista, al igual que los anteojos o lentes de contacto con aumento.