En el mundo, los incendios forestales constituyen la causa más importante de destrucción de los bosques. La mayoría de los incendios forestales son causados por las personas debido a negligencias, descuidos en el uso del fuego o mala intención. Por ello, en esta época de verano cuando las temperaturas aumentan, hay vientos intensos y sequedad del ambiente es cuando los incendios se incrementan y se propagan con mayor facilidad.
En tal sentido, desde el organismo se recomienda no arrojar colillas de cigarrillos, ni fósforos encendidos, y para aquellas personas que residen cerca de bosques o en el campo, se les solicita que mantengan los alrededores de su vivienda despejada de arbustos y desechos.
Por otro lado, Defensa Civil advierte que no es conveniente encender fogatas, ni fuegos en zonas cercanas a pastizales y bosques. En caso de hacerlo deberá respetar las siguientes indicaciones, para evitar un incendio: al encender fuego el lugar debe estar despejado de pasto, ramas, árboles o elementos que puedan arder, deberá delimitar la zona del fuego con piedras, arena, ladrillos y zanjas para impedir o evitar que se propague y disponer siempre de elementos como tierra y agua para apagarlo.
Por último, frente a un incendio forestal se recomienda llamar al 911 como primera medida y luego evacuar el área y al hacerlo procurar cubrirse boca y nariz con un paño para no inhalar humo. Durante la evacuación se recomienda caminar cerca de aguas abiertas poco profundas como ríos, lagos o lagunas que podrían servir de vía de evacuación, siempre en sentido contrario al fuego y al viento. Además se aconseja no retroceder hacia una área quemada porque, quedan puntos calientes pueden reactivarse sin previo aviso.