Asimismo recuerda que estos actos se encuentran penados y sancionados por la legislación vigente.
Muchas veces y dado el desconocimiento respecto a la legislación vigente, la gente compra sin saber ejemplares de la fauna silvestre, que son vendidos de forma ilegal trasgrediendo toda las normas de la Dirección de Fauna Silvestre provincial.
Es importante que quien desee adquirir un ejemplar sepa que, para que ese animal haya llegado a destino, un importante número de ellos puede haber muerto producto del cautiverio o porque al capturarlos han dejado a sus crías, las que dependiendo la época, no sobreviven sin sus progenitores. Muchas de estas actitudes dejaron situaciones poblacionales complejas, poniendo en riesgo su supervivencia. Tal es el caso del cardenal amarillo, que por su vistoso plumaje y canto melodioso, ha sufrido históricamente una fuerte presión de captura para abastecer comercio ilegal como ave de jaula y enfrenta hoy serios problemas.
Otro habitante, la tortuga terrestre patagónica, que se encuentra en la provincia fitogeográfica del monte y actualmente se encuentra al sur de Buenos Aires, La Pampa, Mendoza, Neuquén, Río Negro y el noreste de Chubut, enfrenta producto de la caza ilegal, según la UICN (Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza) el estatus de conservación vulnerable. En estos momentos, es el reptil autóctono vivo más comercializado en el mercado ilegal de mascotas de Argentina.
Entre las actividades que competen a la Dirección de Fauna Silvestre se encuentra el manejo, la tenencia, uso, crianza, tránsito, introducción, extracción y comercialización entre otros, de animales de la Fauna Silvestre, sus productos, subproductos y derivados.
Por otra parte, la tenencia de animales ponzoñosos trae aparejado el riesgo de reacciones de hipersensibilidad, sumado a la carencia de sueros anti-veneno de todas las especies en cuestión, poniendo en peligro a muchas personas. Ejemplo de esto es lo acontecido hace unos días en Catriel, en donde de manera ilegal era mantenido como “mascota” un ejemplar de yarará ñata (Bothrops Ammodytoides), por la que un niño de 8 años debió ser derivado al Hospital Dr. Pedro Moguillansky de Cipolletti para su tratamiento por la mordedura del ejemplar.
Hay descriptas más de 200 enfermedades zoonóticas de origen vírico o bacteriano entre las que podemos citar: tuberculosis, salmonelosis, ampylobacteriosis, echinococosis, listeriosis y rabia, entre otras.
La introducción de ejemplares trae aparejado el riesgo de ingresar también enfermedades no presentes en el área, las que pueden tener consecuencias sobre la actividad productiva y sobre la biodiversidad. Siempre es importante tener en cuenta que mediante el incorrecto manejo de los efluentes y residuos de las especies exóticas mantenidas en cautiverio se colabora de manera sustancial a la dispersión de agentes patógenos.
El daño que se inflige a los ecosistemas naturales por invasiones biológicas suele ser irreversible, y sus consecuencias van más allá de la disponibilidad de recursos financieros para solucionar estos problemas: tienen impactos duraderos y pueden llevar a otra especie a la extinción, por lo que la mejor opción sigue siendo la prevención.
Las invasiones biológicas constituyen la principal causa de pérdida de biodiversidad en áreas naturales protegidas en Latinoamérica; la preservación de nuestro medio ambiente, con todas las especies vegetales y animales que la habitan, representa una potencial riqueza para las generaciones futuras.
Asimismo la Dirección de Fauna Silvestre recomienda que, frente a la detección de sitios ilegales de venta, se efectúe la denuncia correspondiente a los teléfonos 02920 420282 y 423391.