A través de estas decisiones concretas, el Gobierno Provincial mantiene su firme decisión de seguir recuperando económicamente sectores que aún sienten los efectos de la pandemia y enfocar sus prioridades en acompañar a los más vulnerables.
De esta manera, un vehículo que en 2021 tuvo un impuesto anual de $30.000 sobre una valuación fiscal de $1.500.000, el año que viene -sea cual sea el valor del auto actualizado por ACARA-, el impuesto no podrá superar el 40%. La Agencia de Recaudación Tributaria estima que, en muchos casos, no será necesaria la aplicación del límite, ya que el incremento no llegará a ese valor.
Las valuaciones de los vehículos son determinadas por ACARA, la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina, en enero de cada año y sobre esos valores se calcula el impuesto automotor anual. Considerando la situación actual, y previendo un aumento en los valores debido a la inflación, el Gobierno Provincial adoptó nuevamente la medida de incorporar tope de aumento.
Lo mismo sucede con el impuesto inmobiliario, cuyo tope es del 35% sobre el calculado en 2021, siempre que el inmueble no tenga mejoras declaradas ni cambio de suelo en el año anterior.
Por ejemplo, una vivienda que no sufrió mejoras y que en 2021 pagó $2.750 anuales -sobre una valuación fiscal de $ 505.000- el año que viene abonará $3.709 por la aplicación del tope en el impuesto.
Estas medidas buscan reducir el impacto impositivo que puede generar la inflación actual en el valor de los autos y los inmuebles.